Podemos quejarnos todo el día por todo lo malo que nos pasa, o ponerle una sonrisa a la vida para intentar mejorarlas. Combatir el mal humor con simples acciones es la opción que más beneficios nos traerá.

Hay dias buenos y hay días malos. Nuestro humor es como la temperatura ambiental, puede ir cambiando hora tras hora en un mismo día. Pero a diferencia del clima, contra nuestro humor tenemos varios remedios con que combatirlo. Sentirse bien depende exclusivamente de nosotros. Y muchos dirán que es dificil mantenerlo cuando nos ocurren cosas malas. Claro que es dificil, pero llorando, insultando y peleandonos con la gente que nos rodea no hace mas que complicar las cosas. Asi que, entre seguir arruinando todo y tratar de mejorarlo, ¿qué opción escogeremos?

Para vencer al mal humor, no hay límites en las acciones que podemos aprovechar, por suerte la risa es infalible y sobre todo, gratis, así que no hay excusas para intentar ponerle una carcajada a la vida.
La risa es un remedio contra la depresión. No sólo es algo placentero, sino que además es saludable. Reír hace trabajar a la glándula pituitaria, liberando endorfinas (las “hormonas de la felicidad”) y mejorando nuestro estado anímico. ¿Cómo reírnos? Podemos ver una película de humor, o videos divertidos en Youtube, en este sitio encontraremos infinidad de clips para lanzar varias carcajadas. Y si no encuentras de qué reírte, no te preocupes: forzá la risa. Este sencillo truco también propicia la liberación de endorfinas… ¡y además te contagiará para conseguir una risa verdadera en poco tiempo!

Hay miles de motivos por los que podemos tener malos humores o malas sensaciones, pero por fortuna, también hay pequeñas acciones que nos ayudan a elevar nuestro ánimo hasta las nubes. Entre ellas, la actividad física es esencial, ya que propicia una liberación y una recanalización de nuestra energía hacia un punto de buen provecho. Y no hay excusas en ello: si no puedes practicar un deporte o ir al gimnasio, intenta dar unas vueltas a la manzana o pasear por el barrio, y vas a sentir que tu cuerpo se va vigorizando casi instantáneamente.

La apariencia física también es un elemento muy importante a la hora de sentirnos mejor. En esos días en los que las malas sensaciones amenazan con sobrepasarnos, podemos vestirnos con la ropa que nos sienta mejor, cambiar de peinado, usar el mejor perfume y salir a la calle listo para dominar al mundo. ¿Quién dice que sólo hay que vestirse bien para ocasiones especiales? Tenemos nuestro armario repleto de atuendos listos para darnos un golpe de autoestima. Vestir con la ropa que nos sienta bien  seguro va a levantar miradas en los demás, y hasta algún que otro piropo.

El ambiente que nos rodea es muy influyente sobre nuestro estado de ánimo. Para conseguir mejorar nuestro humor, debemos procurar iluminar el ambiente con lámparas de pie y hasta con velas, evitando la luz direccional desde arriba. También busca, en lo posible, usar iluminación cálida, en lugar de tubos fluorescentes y luces blancas, y rodéate de elementos decorativos amarillos y anaranjados. Sólo falta poner la música que prefieras, y ya estás en buen camino para elevar tu estado de ánimo.

Todo depende de nosotros, con pequeños cambios positivos día a día iremos dominando el mal humor y encarando la vida de otra manera. Estos cambios pequeños incluyen hacer un poco más de ejercicio, comer un poco más sano, retomar algún hobby olvidado, etc., y no requieren de mucha motivación, pero ayudan a empezar con pequeños pasos.
Acompañado de esos cambios, se debe también exterminar los pensamientos negativos y enfocar los pensamientos positivos. Esto se logra tratando de verle el lado bueno a cada situación de la vida, en vez de enfocarse en los detalles defectuosos.

Si, es muy fácil decir que hay que cambiar, pero también es muy fácil quejarse de algo sin siquiera intentar un cambio. Afortunadamente, todo depende de nosotros, el control remoto está en nuestras manos.

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