Guía para cuidar la piel en verano y lograr un buen bronceado
En épocas de veraneo, la exposición al sol es muy peligrosa, especialmente en los primeros días, cuando la piel esta aún sensible y no está preparada para estar mucho tiempo en contacto con los rayos solares. En esta guia veremos todos los cuidados que debemos tener en cuenta para evitar quemaduras y disfrutar de un sol a pleno sin riesgos.
Un buen bronceado nos ayuda sentirnos más bellos, jóvenes y que la ropa nos queda mucho mejor, pero el sol es un arma de doble filo. Si bien nos aporta muchos beneficios como la vitamina D y la fijación del calcio, también nos proporciona cierto peligro, sobre todo cuando hacemos uso y abuso de los rayos del mismo, especialmente cuando la piel aun se encuentra muy blanca y saliendo de un frío invierno.
Pero, en la actualidad contamos con algunos aliados que nos permiten disfrutar de todos su beneficios sin dañar la piel, como son los protectores solares y los autobronceantes, que son muy eficaces, siempre y cuando respetemos algunos horarios, los elijamos correctamente y los usemos según las especificaciones del fabricante.
Cuidados en la Piel.
Antes de comenzar a tomar sol, debemos hacerle a nuestra piel un tratamiento integral, primero una limpieza muy profunda, para extraer todas las impurezas y evitar que se manche al tomar sol.
En el rostro se puede comenzar con un pulido suave que remueva todas las células muertas. Para la piel del cuerpo, nada mejor que exfoliarse diariamente durante la ducha con un guante de crin. En ambos casos, luego de la exfoliación, aplicar una buena crema humectante. Es muy importante comenzar a tomar sol con una piel limpia y humectada.
Horarios.
Siempre, no importa en que estación del año nos encontremos, se debe enviar la exposición al sol entre las 10:30 – 11 de la mañana y las 16,30 horas de la tarde. En este horario los rayos solares caen en forma muy perpendicular a la tierra y la cantidad de radiación nociva que recibe la piel expuesta a esa hora es mayor.
Hay que empezar a tomar sol fuera de estos horarios y siempre gradualmente, los primeros días pocos minutos para luego ir agregando más tiempo cada 2 o 3 días.
Protectores.
Se presentan con distintos grados de factor de protección, y el índice del mismo deberá adecuarse al tipo de piel que se tenga. Cuanto mas blanca es la piel mayor debe ser el factor de protección, el cual puede ir bajando progresivamente a medida que la piel va tomando color. Para determinar cual es el protector adecuado a cada piel, existe una clasificacion llamada Fototipos con 6 variantes:
Tipo de piel I
Piel blanca, ojos azules y pecas
Se producen intensas quemaduras solares
No tomarán color nunca, la alternativa es conseguir un bronceado sin sol.
Usar bloqueador solar factor 40 o más
Tipo de piel II
Piel Blanca
Se queman fácil e intensamente
Se enrojecen y casi no toman color
Bronceador con Factor de protección Solar de 25-40 (alta)
Tipo de piel III
Raza caucásica
Se queman moderadamente. No puede exponerse en las horas picos.
Si consigue no quemarse toma un poco de color
Factor de protección Solar de 15-25 (media)
Tipo de piel IV
Blanca o ligeramente amarronada, pelo y ojos oscuros.
Se queman la piel si se exponen al sol por mucho tiempo
Se pigmentan fácilmente y de forma inmediata al tomar sol
Factor de protección Solar de: 8-15 (baja)
Tipo de piel V
Piel amarronada
Rara vez se queman
Se pigmentan con facilidad e intensamente
Factor de protección Solar de 4-12 (baja)
Tipo de piel VI
Razas negras
No se queman nunca la piel
Se pigmentan intensamente
Siempre presentan reacción de pigmentación inmediata
Factor de protección Solar de 2-4
Los protectores permiten un bronceado parejo, con buen tono y además nos proporcionan filtro solar, por lo que nos permite exponernos al sol con ellos.
También hay protectores pre y post bronceado, que sirven para preparar la piel unos días antes de exponerse al sol y para prolongar luego el color.
Algunos consejos:
- Es bueno protegerse los labios y las cicatrices con labiales bloqueadores solares, y los ojos con gafas de sol de calidad para evitar las irritaciones y la formación de arrugas en su contorno.
- Es muy importante beber mucha agua para evitar la deshidratación, una piel deshidratada no podrá generar la melanina que da el color bronceado.
- Es conveniente no quedarse mucho tiempo quieto bajo el sol. Al moverse, los rayos solares se distribuyen mejor y se obtiene un bronceado más uniforme.
- En los días levemente nublados las radiaciones solares inciden casi igual que en contacto directo con el sol (si pasa la luz solar es porque pasan los rayos solares), por lo que es necesario aplicarse las protecciones también en esos días.
- Después de una jornada de sol, es muy importante ducharse con agua tibia para cerrar los poros sin que el cambio de temperatura sea muy brusco, secarse bien. Para prolongar el bronceado, aplicarse una crema para después del sol que tiene elementos calmantes, anti-inflamatorios, hidratantes, suavizantes y regeneradores del epitelio, los cuales no posee una crema hidratante normal.
- Si a pesar de todos los cuidados la exposición al sol fue tan severa que la piel sufrió quemaduras, existe un remedio muy simple para calmar el dolor, el Aloe Vera.
Para aplicarla, tomar una hoja, limpiar y eliminar las espinas. Luego se corta transversalmente (por el centro) para dejar al descubierto la parte interna de la hoja. Apoyar esta parte sobre la piel quemada y dejar actuar. Este gel natural del Aloe Vera calmará el dolor y ayudará a la piel a regenerarse.
Una vez que el gel se ha secado, se puede repetir la operación.
que protector solar y que crema para bronceado me recomienda. desde yamucha gracias.
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