Luego de la depilación la piel queda mas sensible y expuesta a los agentes ambientales, lo que puede producir manchas y dañarse fácilmente. Aquí te damos algunas sugerencias para cuidar tu piel luego de depilarte.

A menudo las técnicas de depilación hogareña, el apuro, o la falta de cuidado, pueden dejar pequeñas marcas y manchas en nuestra piel, que hacen que perdamos ese gusto por la exhibición de las zonas libres de vellos. Hay algunos trucos para evitar estas manchas y marcas, aunque también los hay para hacerlas desaparecer.

En la depilación la piel sufre lesiones, que son más o menos sufridas según cada persona. Las técnicas de depilación por raspado o rasurado son las menos agresivas con la piel, aunque son las menos eficaces y las menos duraderas. Por su parte, la depilación mediante máquinas eléctricas es eficaz, aunque un tanto agresiva, ya que su funcionamiento involucra la retirada de los vellos uno a uno. Si bien la costumbre por su uso hace que el dolor y las molestias de su práctica vayan menguando y casi desapareciendo con el tiempo, la piel, aunque acostumbrada, sufrirá pequeños daños, visibles como manchas y puntos rojos posteriores a la práctica.

El tipo o técnica de depilación convencional más “agresiva” con la piel es la de la cera, ya sea caliente o fría, en pasta, en roll u otras similares. Si bien en las otras técnicas debemos ser cuidadosas con el cuidado de la piel posterior a la depilación, en las técnicas de cera nuestra precaución debe ser máxima, ya que este mecanismo retira tanto los vellos, como las capas de células muertas de la piel, dejándola completamente expuesta.

Lo más importante para evitar las manchas en la piel se relaciona con la exposición directa a los rayos solares. La piel tratada queda vulnerable y, por lo tanto, más expuesta. Entonces, debemos procurar realizar la depilación durante los últimos momentos de la tarde o el inicio de las noches, para que la piel pueda recuperarse durante el descanso nocturno.

Las marcas en las piernas y en las axilas son las más cotidianas. En las axilas, las manchas más comunes son las que dan a esta piel una coloración grisácea, o bien pequeños puntos rojos. Para evitarlas, procura depilar esta zona por las noches, y no aplicar cremas, desodorantes ni otros productos, para que la piel se mantenga libre de amenazas. Al día siguiente, evita la exposición de esta zona al sol, y usa productos específicos para después de la depilación, para no manchar tu piel.

Los productos de cosmética blanqueadores son muy útiles, en especial en esta zona tan delicada. Hoy podemos encontrar en el mercado muchos desodorantes que poseen elementos que blanquean nuestra piel, dejando nuestras axilas bellas y de color normal. También puedes hacer una exfoliación suave, una vez por semana, con productos especiales o con un preparado casero a base de jugo de limón y azúcar, para ir blanqueando tus axilas con el tiempo.

Respecto de las piernas, las manchar y marcas suelen aparecer por la exposición de la zona depilada al sol, y también debido a las técnicas utilizadas. Las depiladoras eléctricas, si bien son prácticas y eficaces, pueden dañar en exceso algunos tipos de pieles, dejando pequeñísimas lesiones que luego se exhiben como pequeñas picaduras de insectos. La mejor técnica para solucionar estas marquitas es cambiar el sistema de depilación, o bien reemplazar la técnica por completo. Puedes comenzar por cambiar tu depiladora eléctrica por una diferente y probar. Si en tres meses el mal no se ha solucionado, te recomendamos cambiar a otra técnica por completo, como la del uso de cera.

Es importante exfoliar la piel de tus piernas para despegar las células muertas y “levantar” los vellos, dejándolos más expuestos y fáciles de ser retirados. Te puedes exfoliar en la ducha, aprovechando también el calor y el vapor para ablandar los vellos y abrir los poros. Luego, depila la piel limpia y bien seca, o bien aplica aceites y cremas que preparen a tu piel para realizar la depilación al día siguiente.

Si estas manchas y marcas no desaparecen, consulta a tu esteticista y a tu dermatólogo, quienes te podrán ayudar en caso de que estén apareciendo por otros motivos, como alergias u otras razones.

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