Ya sea para compartir videos hogareños con amigos o para jugar a ser directores de cine, gracias a Youtube y la proliferación de nuevas tecnologías, la creación de videos dejo de ser un arte para pocos. Hoy esta al alcance de quienes tienen pocos recursos pero mucha imaginación.

Hoy Internet nos ofrece un mundo de posibilidades en lo que respecta a compartir nuestra información, incluyendo documentos, escritos, fotografías, y por supuesto, videos. Youtube es uno de los portales, quizás el más popular, para hacer esta transferencia de videos, en donde podemos publicar nuestras creaciones y recuerdos para compartirlos con personas de cualquier rincón del mundo, o sólo con nuestros conocidos y allegados.

Si bien podemos hacer un análisis exhaustivo de los beneficios, funciones y posibilidades que nos brinda Youtube, el objetivo de esta nota es introducirnos en su mundo, intentando dar una breve y sencilla explicación de cómo subir videos a este sitio y algunas estrategias sencillas para hacer de éstos videos mas atractivos y con mejores resultados. Porque sabemos que para poder disfrutarlo de manera correcta, deberán verse y oírse bien.

Subir un video a Youtube es bastante sencillo. Comenzaremos por registrarnos de forma gratuita a este portal, presionando sobre el botón de Registro (Sign up) ubicado en la parte superior de la pantalla. Luego de confirmar la suscripción mediante el correo electrónico, iniciaremos sesión ingresando con nuestros datos.

Una vez en la pantalla de cuenta de usuario, debemos ir al sector de Subir Video (Upload) y completar algunos datos. Entre ellos, debemos asignar un título y una breve descripción del video, y también colocaremos allí las palabras clave más apropiadas para facilitar la búsqueda y el acceso al mismo. Otros datos que estableceremos serán el idioma y la categoría del video (Vehículos, Noticias, Personas y muchos otros). A continuación presionamos sobre “Seguir” (Continue).

Ahora seleccionaremos el video desde nuestra computadora o de la fuente de almacenamiento donde lo tengamos. En este paso, podremos establecer si se trata de un video público o privado, según nuestro deseo. Si seleccionamos “privado” podremos determinar la lista de personas que podrán visualizarlo, desde la lista de contactos de nuestra cuenta de usuario. Luego, sólo debemos presionar sobre el botón de “Subir video” (Upload video) y ya tendremos nuestro video en lista de espera para ser publicado. Podremos, luego, enviar un aviso a nuestros amigos para invitarlos a disfrutar de estas creaciones.

Recuerda que puedes posicionar tu video para que tenga mayor exposición con algunos trucos, y asegurate de cumplir con las normas básicas de los contenidos, incluyendo un tamaño máximo de 1 Gb, una duración máxima de 10 minutos, y que se encuentre en formato H.264, MPEG-2 o MPEG-4 preferentemente, con una resolución ideal de 640×360 o de 480×360.

La técnica al servicio de la atracción

Si tu interés no es hacer simplemente videos caseros para compartir con amigos, y quieres ir mas allá para crear algo viral (que tenga muchas visualizaciones) habrá que ponerse a pensar en videos que sean más dinámicos y que atrapen la atención del público para aumentar su exposición.
Podemos valernos de muchos trucos y técnicas, pero aquí haremos hincapié en el uso y manejo de la cámara y micrófonos, para lograr un video más atractivo.

Hay variados movimientos de cámara que podemos usar para dar más vida y sabor a nuestras capturas, y que podremos imitar con elementos de nuestro hogar.

El movimiento horizontal de la cámara, por ejemplo, describe secuencias con una visualización de izquierda a derecha (o viceversa) para obtener mayor fluidez en las escenas. Podemos seguir a una persona en bicicleta, a un perro caminando, o hasta a un coche. También podemos usarla para lograr panorámicas más intresantes. Para hacerla podemos valernos de rieles, o simplemente de una silla con ruedas, o hasta de un carro o bicicleta con una suspensión que absorba los golpes.

Para lograr elevar o bajar la cámara (mismo movimiento que el anterior, pero hacia arriba y abajo) podemos utilizar elementos variados. Una escalera, un brazo mecánico o un invento de un trapecio al que atemos la cámara en un extremo serán útiles en esta técnica. También podemos usar un trípode o el pie de un ventilador alto, colocar la cámara arriba y aflojar el ajuste levemente y con cuidado para tener una “bajada” de cámara gradual y nítida.

Respecto de las herramientas propias de la cámara, debemos usarlas con cuidado. Una de estas es la técnica del zoom o acercamiento y alejamiento de la imagen en foco. El zoom (zoom in o zoom out) ha de ser usado con lentitud y nunca bruscamente, ya que esto hace una escena chocante y puede llevarnos a perder el foco en la imagen de captura (salvo que sea ese justamente el efecto que deseemos causar). Tampoco abuses de los efectos propios de la cámara, ya que a pesar de ser innovadores, a veces pueden confundir a la audiencia, haciendo que pierdan el interés por la temática o que pierdan el hilo de la trama.

Para optimizar el sonido de tus videos, podemos utilizar una pista de sonido (en MP3 u otro formato) para dar un sonido de fondo a las imágenes y secuencias capturadas. Aunque se trate de un montaje de fotografías e imágenes: una buena pista de audio o una buena captura de sonidos de la naturaleza, bien claros, realmente harán la diferencia.

Para videos con palabras y diálogo, habrá que utilizar micrófonos que se pueden conectar a la filmadora, o utilizar un micrófono hacia la compu para luego editarlos en conjunto. Los micrófonos harán más claro el audio, eliminando el ruido de entorno.

También hay un simpático truco que podemos aplicar, en especial en los montajes o en los videos que no tengan diálogo o voces, y es hacer una doble exposición. Esto significa que podemos filmar las imágenes en una secuencia, y volver a “filmarlos” más de cerca y con un micrófono para capturar un sonido más claro. Luego, en el proceso de edición, usaremos las imágenes de la primera tarea y el audio de la segunda captura, para lograr una imagen clara y un sonido cristalino.

Si la secuencia requiere de un diálogo y no contamos con el equipo necesario, utilizaremos al menos un micrófono de ambiente, procurando hacer la captura en una habitación o recinto cerrado, alejado del ruido exterior.
Si en la secuencia hay elementos que puedan generar sonidos molestos, hay también algunos consejos para “silenciarlos”. Por ejemplo, si estamos filmando una entrevista y los “actores” están tomando café, colocaremos cinta de papel adhesiva en la base de las tazas para que al apoyarlas sobre el plato no causen demasiado alboroto. Si van a estar sentados, hay que buscar sillas que no rechinen, aunque no combinen entre sí. Y si de casualidad durante la filmación ocurrió algún evento inesperado (por ejemplo, pasó un avión o un helicóptero, ladró un perro, sonó el timbre o el teléfono) habrá que repetir la escena o la pregunta para poder editar luego y tener imagen y sonido claros.

Lo bueno de Youtube y de contar con cámaras y micrófonos para hacer creaciones caseras es que se hace disponible todo un universo a nuestro alcance, y que antes solo era posible para unos pocos profesionales. Sin intención de transformarnos en Steven Spielberg, con simples técnicas, pocos recursos y mucha imaginación, lograremos desahogar nuestra creatividad haciendo videos atractivos para subir a Youtube… y quién dice, a lo mejor, se convierte en uno de los más vistos en esta famosa red social.

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