El parquet es un piso que da imagen de calidez y elegancia al hogar, pero requiere de muchos cuidados para que se luzca. Veamos como colocarlo y algunos consejos prácticos para cuidarlo y mantenerlo.

El parquet es un revestimiento de madera que se puede colocar en tiras cortas o paneles. Las maderas con las que se elabora este piso son duras y nobles como el roble, abedul, caoba, cerezo o maderas compuestas. Algunos modelos ya vienen barnizados y a otros se le deben aplicar 2 o 3 manos de pintura luego de colocarlos.
La elección del parquet dependerá del presupuesto con que contemos, aunque, si nos animamos a colocar nosotros mismos este tipo de suelo, nos ahorraremos el costo de la colocación y podremos elegir una mejor calidad.

Su colocación no es complicada, solo debemos tener en cuenta algunas pautas sencillas para lograr excelentes resultados y un trabajo que perdurará por el tiempo.

Luego de haber elegido el suelo que queremos y de haberlo adquirido, no es conveniente colocar el parquet de inmediato. Lo mejor es dejarlo descansar dentro del ambiente en que lo ubicaremos, para que se vayan adaptando a las situaciones atmosféricas del mismo y evitar posibles deformaciones.

Antes de colocar el parquet debemos limpiar muy bien el suelo en donde lo apoyaremos, alisarlo si hubiera algunas imperfecciones y controlar que esté bien seco. Si el suelo presenta humedad, debemos eliminar la misma antes de colocar el parquet.
Cuando el suelo presente todas esas características, podremos ir colocando el adhesivo recomendado por el fabricante. Luego, iremos colocando los paneles y nivelando con ayuda de un taco de madera.
Recuerda que el parquet levanta el suelo unos 12 mm, por lo que deberás cepillar las puertas.
Lo ideal es comenzar por la parte más alejada de la puerta y terminar la colocación en la misma. Una pared bien lisa es la mejor opción.

Utiliza un listón guía y cordel para no torcerte al ir colocando las piezas. Distribuye en forma pareja el pegamento con ayuda de la espátula dentada y ve colocando las piezas con mucho cuidado. Utiliza un nivel para controlar que todas estén niveladas.

No se debe dejar espacio entre pieza y pieza y si se nos escapa un poco de pegamento, debemos limpiarlo en el momento con un poco de agua.
Debemos dejar unos 5 milímetros entre la última pieza y la pared, esto se llama junta de dilatación, la cuáles se taparán luego con el zócalo o rodapié.

Cuando llegue el momento de cortar la pieza, realiza una plantilla con papel, superponla en la pieza a cortar, márcala y luego córtala.

El trabajo estará listo. Ya tienes un hermoso piso de parquet en tu casa… ahora veamos como mantenerlo.

El parquet, como otros suelos de este tipo, requiere cuidados constantes aunque sencillos para que se mantenga siempre en condiciones óptimas. Mayor importancia cobran estos consejos si el parquet esta expuesto a mucho tránsito o en un ambiente con puerta al exterior donde habrá que prevenir marcas o rayas o tratarlas a tiempo y correctamente.

Es conveniente colocar un felpudo antes y después de cada puerta de ingreso a la habitación. También evitar que se pise el suelo con calzados mojados, sucios con restos de gravilla, tierra, barro, etc. o con tacos finos que puedan marcarlo.
Para evitar arañazos y un desgaste excesivo en las zonas de paso o de mayor uso, lo ideal es protejer esos sectores con caminos o alfombras.
En las patas de los muebles pesados o que se pueden desplazar con frecuencia, es mejor poner una felpa, fieltros o tapas a fin de evitar rayar el piso de madera. De todas maneras, evita arrastras muebles pesados, y si es inevitable, de debe ser cuidadoso en el proceso y dos o tres veces al año revisar estas protecciones en las sillas, muebles y puertas para prevenir arañazos.

Cuando se derrame líquido sobre el parquet, hay que secarlo inmediatamente con un papel absorbente y luego retirar el resto con un paño apenas húmedo. Si venis que algo de líquido ha pasado por debajo del piso entre sus aberturas, utilizaremos un secador de pelo con cuidado para no quemar la madera hasta eliminar el líquido que se ha filtrado.

Se recomienda mantener la humedad ambiental de entre el 35% y el 65% para evitar la contracción y expansión de la madera, lo cual podría deformarla.
Si tienes humidificadores en el ambiente evitarás que la madera se reseque, y en periodos húmedos hay que emplear y ventilación y calefacción.

Recuerda que los rayos del sol directos sobre el piso de parquet producen decoloración. Es posible evitarlo cerrando las cortinas en las horas en que el sol penetra por las ventanas.

En cazo de producirse un raspón o arañazo sobre el parquet, deberemos utilizar pasta para madera (ver como hacerla al final de la nota), aplicando cuidadosamente en el rayón con un paño bien limpio. Esta pasta debemos mezclarla previamente con betún para obtener un color parecido al del parquet. Una vez que se secó la pasta, debemos frotar con un cepillo hasta que el arañazo se haya borrado.

Un ruido bastante molesto sucede cuando pisamos sobre el parquet que esta elevado o por alguna razón perdió la unión entre sí. Para evitar el crujido la solución es simple, espolvoreamos los intersticios con talco, y mediante un cepillo trataremos de que penetre cubriendo todo. A continuación, practicamos unos cuantos saltos encima para movilizarlo y se acomode hasta el último rincón. Así eliminaremos esos molestos crujidos.

Si el piso tiene mucho transito y desgaste, con muchas marcas y manchas, es recomendable lijar todo el piso y barnizar o plastificarlo de nuevo.
No hay que esperar a que el piso este mal trecho o muy estropeado para que el lijado sea solo de unos milímetros. No se debe esperar más de 10 años.

Con respecto a la limpieza, es importante no dejar que la suciedad se pegue sobre la madera, para ello hay que limpiarlo a menudo eliminando el polvo con una mopa o un trapo seco. Para esta tarea también se puede utilizar un cepillo de cerdas naturales destinado sólo a suelos de parquet. Si hay partículas de suciedad podemos emplear una aspiradora para recogerlas sin arrastrarlas, evitando el efecto lija que puede producir ralladuras en el suelo.
Si el parquet se mancha, pasaremos un paño húmedo, sin mojar demasiado la madera.

Cuando debamos trapear el parquet (no mas de 1 vez por semana) procura utilizar productos especialmente fabricados para este tipo de suelos, y usa siempre la dosis mínima recomendada. A falta de un producto específico, puedes añadir al agua de fregar un chorrito de vinagre para resaltar el brillo. Luego, ventila la habitación.

No añadas al agua productos con alto componente ácido o que contengan ceras o siliconas. Su uso repercute en el posterior rebarnizado. El peor enemigo de los suelos de madera son algunos productos de madera con químicos o muy abrasivos, que a la larga le quitan el brillo y generalmente corroen el suelo.

Cada 2 o 3 meses es recomendable esparcir sobre el parquet una fina capa de aceite de oliva con un trapo limpio o arrastrando un paño con los pies, con esta acción se evitará que la madera se reseque y los pisos quedarán superbrillantes.En la actualidad casi todos los suelos de madera vienen barnizados o protegidos y no necesitan encerarse como se hacía antiguamente.

Como preparar pasta para madera:

La pasta de madera es un producto muy utilizado en trabajos con madera. Veamos a continuación dos fórmulas distintas para hacer pasta para madera con diferentes consistencias.

Esta primera opción es especial para tapar pequeñas fisuras o rayones.
Tendremos que recortar papel de periódico en trocitos e introducirlos en un cubo. Luego, echar agua hirviendo sobre el periódico troceado y remover la mezcla con una cuchara de madera, hasta obtener una pasta espesa.

Finalmente dejaremos que se enfríe y añadimos un paquete entero de pegamento para papel (el de la escuela) y mezclarlo hasta obtener una pasta homogénea con la que tapar las rendijas del parquet, por ejemplo.

La segunda receta es más espesa y resulta ideal para tapar agujeros o marcas profundas. Consiste en mezclar viruta fina de madera con pegamento vinílico blanco o cola de carpintero, de manera uniforme, para conseguir una pasta espesa y seca.
Si el pegamento está muy concentrado o duro se puede ablandar agregando una muy pequeña proporción de agua.

Esta pasta se seca más rápido que la primera, hay que prepararla y usarla enseguida.

Para que el color de la pasta sea similar al de la superficie a reparar, se puede agregar unas gotas de tinte para madera al final de la preparación y mezclar o amasar bien.

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