Para decorar de una manera distinta tus portaretratos, nada mejor que crear fotos originales con programas como Photoshop, Corel, o incluso el Paint. En esta nota te ayudamos a dar los primeros pasos en la edición de fotografías.

La computadora puede ser un gran aliado a la hora de definir el arte de tu hogar, en especial si sigues una decoración particular, que bien puede ser moderna, glam, o virtualmente, cualquier estilo definido. Sólo necesitarás algunas buenas fotos, y una buena cuota de creatividad para lograr cuadros originales, divertidos y espectaculares. No es necesario que tengas gran conocimiento sobre los softwares y programas de diseño y edición fotográfica. En esta nota, vamos a aprender algunos trucos sencillos para lograr fotos distintas, con efectos atractivos, y que servirán para exponer esas fotos especiales de una manera distinta, desde cualquier computadora y en cuestión de minutos.

Vamos a empezar con el mas sofisticado. Una técnica sencilla es la creación de cuadros en variados colores, estilos y formatos con el programa Photoshop. Este software es el mas famoso editor de imágenes, pero no hay que tenerle miedo. Aquí aprenderemos una manera sencilla de aplicarle efectos creativos a las fotos aún si nunca has utilizado este software.

El primer paso será elegir la fotografía (una de rostro estaría bien, aunque puede ser otra de tu elección, de preferencia una en la que el fondo no tenga protagonismo), la abrimos en Photoshop, y aquí comienza la diversión.

Para simplificar la tarea, explicaremos la forma más sencilla de aplicar diversos efectos. Si cuentas con mayor experiencia sobre este programa, vas a saber que hay muchísimas cosas más por hacer, pero la idea de esta nota es que cualquier persona pueda crear sus propios cuadros originales.

El primer paso será guardar la fotografía con otro nombre, para no perder la original. Para ello, apenas abrimos el archivo damos clic a “Archivo” (“File”), y luego a “Guardar como” (“Save as”). Elegimos la carpeta de ubicación, el nuevo nombre, y corrroboramos el formato (debajo del nombre). Si no estás seguro, dejalo como viene por defecto, que será en formato PSD (para abrir con Photoshop) o JPG (en formato más usual para fotografía e imagen).

Bien, con la imagen abierta en photoshop, damos clic al menú “Filtro”, y luego a la opción “Galería de filtros”. Se abre una ventana que muestra a la izquierda la foto (debajo está el zoom, para acercar y alejar), al centro un menú de opciones, y a la derecha los detalles de cada opción. Lo que debés hacer ahora, es simplemente jugar. Presioná sobre la primera pestaña (Artístico), y dale clic a cada una de las opciones. A la izquierda vas a ir viendo cómo queda. Si sos principiante en este programa, te recomendamos que no modifiques los detalles de la derecha, simplemente dejalos como están por defecto.

Cuando hayas encontrado el efecto que más te guste, haz clic en “OK” o “Aceptar”, y vas a obtener la imagen según el estilo deseado. No te olvides de guardar la imagen con el formato adecuado, por ejemplo, en formato JPG, para poder abrirlo en casi cualquier programa. Para crear una nueva, repite todo el proceso y así podras recopilar imágenes creativas.

Otra manera de crear fotos originales es logrando negativos, en verdad: símil negativos. Esta técnica puede ser realizada en cualquier computadora con Windows 95 en adelante, ya que se realiza con el programa más simple: el Paint de Windows.

Comenzamos por elegir la o las fotos de preferencia. Una vez abiertas con este programa, presionamos sobre el menú “Imagen”, y luego sobre la opción “Invertir colores”. Notaremos que la fotografía se convierte automáticamente en su paleta cromática opuesta, haciendo una suerte de negativo expuesto. Obtendremos así, fotografías originales en tonos fríos, especiales para imprimir y adornar un ambiente de trabajo, un loft, o un hogar que tiende hacia lo minimalista.

Con el software Corel necesitaremos de algunos pasos más. Una vez más, especificamos que quienes tengan mayor idea de diseño y retoque fotográfico, sabrán que el programa cuenta con miles de opciones; sin embargo, para simplificar la tarea, explicaremos una manera sencilla de editar fotografías de modo que hasta quién no había escuchado hablar de este programa pueda hacerlas.

Comenzamos por abrir la fotografía con el programa Corel, en su versión de Corel PhotoPaint. Al igual que en otros programas, lo primero que hacemos es guardar el archivo bajo un nuevo nombre, para preservar la copia original. Damos clic, entonces, en el menú “Archivo”, y luego en “Guardar como”, estableciendo la carpeta de destino, el nuevo nombre, y el formato de archivo.

Aquí también podemos hacer la técnica que vimos en el Paint, dando clic a “Imagen”, y luego a “Transformar – Invertir”. Pero este programa tiene algunas otras opciones que podemos aplicar con tan sólo algunos clics. Veamos a continuación:

Nuevamente es hora de jugar. Así, vamos dando clic al menú “Efectos”, y vamos aplicando las diversas opciones, jugando hasta encontrar el resultado deseado. Recuerda que puedes aplicar cualquier opción, y si no te gusta, con “Control+Z” o la opción “Deshacer” volverás atrás deshaciendo los cambios. Además, la mayoría de los estilos, antes de ser aplicados, abren una ventana de diálogo que permiten ver una previsualización del resultado esperado. Aquí podremos jugar con los detalles de los efectos, ya que se ofrecen en un sencillo valor numérico para aumentar o disminuir, y si no estamos seguros, simplemente presionamos “Escape” y salimos de la opción, sin causar grandes daños.

Recuerda siempre guardar el archivo, y repetir los pasos para volver a editar la fotografía en un nuevo estilo deseado. Luego, podremos ayudarnos con Corel Draw para maquetar un gran cuadro para imprimir en la imprenta, y hacer nuestro propio arte de estilo pop art, cubista, o de cualquier otro estilo.

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