Remedios caseros para la congestión nasal

Foto: stock.xchng - User: woodsy

El resfriarnos nos trae como consecuencia segura un congestionamiento de las vías nasales que nos impide respirar con tranquilidad, y por lo tanto, conciliar un sueño tranquilo, hablar, comer y menos que menos, tratar de realizar alguna actividad física aunque sea moderada.

La congestión nasal normalmente es causada por alergias o algún virus, y puede ser síntoma no solo de un resfrío, sino también sinusitis, rinitis alérgica, gripe y hasta del uso excesivo de gotas nasales.

Esta afección se nota por una nariz tapada, y la imposibilidad de respirar correctamente a través de ella. Los orificios nasales se congestionan por la inflamación de los tejidos que recubren la nariz y los vasos sanguíneos.
En algunos casos, como por ejemplo cuando la congestión nasal se da en los recién nacidos, puede ser fatal dada la imposibilidad de respirar correctamente.

Algunas de las consecuencias es un exceso en la mucosidad, dolores de cabeza, falta de sueño, molestia al respirar, ronquidos, y también puede afectar los oídos y la audición.

Para contrarrestar las molestias de la congestión nasal es necesario aumentar la cantidad de líquidos que se ingiere. Además de las pastillas descongestionantes y antialérgicas, se puede utilizar otros remedios caseros para disminuir las molestias. La medicina naturista nos ha proporcionado de ciertas plantas que son muy beneficiosas a la hora de descongestionarnos, de manera natural y sin químicos de por medio.

A continuación, te daremos algunos ejemplos de plantas muy conocidas por todos nosotros y que nos permitirán respirar normalmente:

Eucalipto.
Esta planta de hojas aromáticas y penetrantes, posee propiedades que permite abrir los bronquios, facilitar la respiración y la expulsión de las flemas y mucosidades acumuladas. Para ello hay que poner las hojas en una olla y dejarlas hervir unos minutos. Luego, nos cubrimos la cabeza con una toalla y nos colocamos encima de la olla (con cuidado de no quemarnos) e inspirar sus vapores. La infusión se puede calentar cuantas veces se desee, el resultado es casi inmediato.

Manzanilla.
De aroma muy agradable, se utiliza de la misma manera que el eucalipto. En ambos casos es fundamental la inhalación del vapor caliente para lograr la descongestión y estimular la secreción. Tambien podemos utilizar gotas de este agua y colocarlas en los orificios nasales.

Ajo y cebolla.
Si, aunque muchos no se lo imaginan, tanto el ajo como la cebolla son excelentes descongestivos. El fuerte aroma que despide cada una de estas plantas descongestionan y aflojan las mucosidades presentes. En algunos casos, y si lo soportamos, se suele recomendar directamente masticar un diente de ajo. Para el caso de la cebolla, nada mejor que cortar media unidad y colocarla en la mesa de luz antes de dormir, de esa manera actuará como decongestivo durante toda la noche y nos permitirá un sueño tranquilo.

Agua con sal.
Gotas de agua con sal marina aplicadas directamente en la nariz, también puede ayudar a desinflamar los tejidos nasales.